Viaje a Marruecos 10 días

Llegamos a la ciudad más famosa del Marruecos, y la más exótica quizás, con joyas arquitectónicas imperdibles como la Madrasa de Ben Youssef, la Mezquita Koutoubia, el Palacio Badia o los Jardines de Majorelle. Según a qué hora llegue nuestro vuelo, tendremos tiempo para hacer una primera incursión en la ciudad, y adentrarnos en los diferentes zocos, que a pesar de su tráfico diario, siguen siendo auténticos focos de sabiduría y saber hacer centenarios, con sus calles dedicadas a oficios como las pieles, el calzado, la orfebrería o las famosas alfombras.Dormiremos en un pequeño y precioso riad de la Medina de Marrakech.

En nuestro segundo día de viaje por Marruecos, podemos hacer dos cosas: O bien un curso de cocina liderado por una ONG que se dedica al empoderamiento femenino de mujeres en riesgo de exclusión social, o bien visitar la ciudad con un guía.Si visitamos la ciudad, lo podemos hacer por libre o con guía oficial. Veremos los principales reclamos de Marrakech como el zoco, la madrassa Ben Youseff (si vamos con guía nos saltamos las largas colas), la plaza Jemaa el-Fna y la mezquita Koutoubia.Si hacemos curso de cocina: Lo haremos de la mano de un proyecto local liderado por una mujer y dónde solo se forma mujeres.Se priorizan las mujeres que tienen más dificultades, que están divorciadas, viudas o son madres solteras y ya son más de 300 las que han salido de sus cursos completos, consiguiendo oportunidades laborales e independencia económica.Podrás aprender a cocinar un exquisito plato marroquí de la mano de este proyecto, y luego degustarlo con tranquilidad. Esta actividad está incluida en el precio, pero está sujeta a disponibilidad. En el caso de que no haya disponibilidad, se modifica el presupuesto.

Hoy conoceremos uno de los entornos rurales más próximos a Marrakech, y gravemente afectado por el terremoto. Por la mañana visitaremos un mercado local de camino a Amizmiz, donde pocos viajeros llegan. Lo haremos con un guía local, una experiencia totalmente inmersiva. Este guía se encarga de coordinar diferentes familias que viven en la montaña, que también han sido afectadas por el terremoto, para que puedan recibir ingresos ofreciendo almuerzo típico marroquí en sus casas. Haremos una excursión de unas 3-4 horas (ida y vuelta), comeremos en casa de una familia local, y tendremos tiempo de preguntar y conocer su realidad y la situación actual después del terremoto. Al final del día, iremos a dormir a nuestro alojamiento de Marrakech. Este día nos brinda una oportunidad de conexión real, alojados del ritmo turístico de Marrakech. Y sobre todo, de colaborar directamente con la población local.

Empezamos nuestro camino al desierto, pero haciendo paradas a los enclaves naturales y arquitectónicos más populares del Marruecos. Para llegar a nuestra primera parada, atravesaremos el precioso Valle de Ounila.Saldremos dirección al famoso Ksar de Ait Ben Haddou, Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO desde el 1987.Aquí se han hecho películas como Lawrence de Arabia, la Momia, Gladiator, Prince of Persia, Babel o Juego de Truenos. Es una visita turística, por libre, y hay que saber que es un lugar 100% dedicado al turismo, pero no por eso poco relevante a nivel arquitectónico. Si nos apasiona el cine, podemos pedir a nuestro guía para ir al museo del cine de Ourzazate (entrada no incluida). Después de comer, iremos dirección a la kasbah de Amridil, a Skoura, y la podremos visitar, junto al palmeral.

En el ecuador de nuestros 10 de viaje por Marruecos, visitaremos el Valle del Dades y las Gargantas del Todra.Seguiremos por la ruta de las Mil Kasbahs hasta llegar a una maravilla para los sentidos: el Valle de Dades, con una vista espectacular de una de las carreteras más famosas del mundo. Intentaremos llegar cuando ya no hay turistas, y comeremos en un restaurante de la zona (no incluido). Por la tarde conoceremos las Gargantas de Todra, y visitaremos una cooperativa comunitaria a Tinghir, donde personas locales, y especialmente mujeres, reciben formación para poder liderar y gestionar el palmeral de forma autónoma.A la hora de la cena, llegaremos a nuestro precioso alojamiento en Hassilabied, un pequeño pueblo delante las dunas del desierto de Merzouga. Empieza nuestra aventura en las dunas, en el sur del Marruecos.

Ya estamos en el desierto. Nos relajaremos y empezaremos a disfrutar de este lugar único al que no estamos nada acostumbrados. Después del almuerzo, podremos, o bien disfrutar de las instalaciones del hotel, o bien hacer una ruta con 4x4 para visitar algunos puntos relevantes de la zona, como por ejemplo pinturas rupestres que nos indican que antes de que aquello fuera desierto, había vegetación y grandes mamíferos, como las gacelas. O que mucho antes, había océano (hay millones de fósiles que así lo demuestran). También podremos, en la misma ruta, visitar Khamlia, o “el pueblo de los negros”. Un lugar donde llegaron esclavos de África subsahariana, y ahora sus descendentes muestran con orgullo las raíces negras, con la música gnawa. Otra opción es visitar el museo bereber, de la Asociación de Jóvenes de Hassilabied, hacer algún taller con las mujeres de la cooperativa o visitar el vecino desierto de Ouzina (estas actividades no están incluidas pero pregúntanos si quieres hacerlas). Por la tarde podremos disfrutar del atardecer en las dunas, e iremos a nuestro próximo alojamiento, unas jaimas preciosas. Allí pasaremos la noche, en el desierto.

Después de ver el amanecer entre dunas, y de un buen desayuno para empezar el día con energía, vamos a El Khorbat. Un proyecto de turismo sostenible que une desarrollo comunitario, recuperación y restauración arquitectónico de un ksar y educación. Almorzaremos allí, y por la tarde visitaremos el museo de cultura amazigh, la cooperativa de mujeres, y haremos un taller de pan con ellas. Cenaremos y dormiremos dentro de la fortificación, en el hotel del proyecto.

Hoy, con un guía local que trabaja para el proyecto, visitaremos el ksar, y nos explicará todo el proceso de restauración que se ha llevado a cabo para que la población local pueda volver a vivir. Descubrimos cómo se vive en un ksar y su fuerte estilo de vida comunitario que permite. También daremos un paseo de unas 2-3 horas por el inmenso palmeral del pueblo, y conoceremos los riesgos de la sequía, y también de la explotación del agua subterránea, ya no solo de este lugar, sino de todo Marruecos. Es una visita muy interesante, que nos hará poner los pies en tierra más de lo que ya los podamos tener.

Después de almorzar, empezaremos nuestro camino a Fez (7 horas en coche), y pasaremos por Ifrane, la suiza marroquí (parada opcional y si hay tiempo). Es un lugar para nosotros de paso, pero es muy curioso ver el cambio en la arquitectura y el estilo. Estaremos como en cualquier ciudad europea, y esto es porque es el lugar de vacaciones de invierno de las personas adineradas de Marruecos. Pero... ¿y tanto en verde en el Marruecos? ¿Y este bosque? Pues sí, Marruecos tiene mucho contraste entre el norte y el sur, y hoy visitaremos el paisaje más verde de todo el viaje. El bosque de los cedros, o bosque de los monos (los famosos macacos de Berberia). Después continuaremos nuestro trayecto hasta Fez, donde pasaremos el último día de los 10 días de viaje en el Marruecos. Dormiremos en un alojamiento sostenible en Fez.

Último día de viaje, visitamos nuestra ciudad preferida en el Marruecos: Fez.Fez es muy bonita. Conserva mucha más vida local en el centro que Marrakech, en sus calles están prohibidas las motos y los coches, y sus más de 9.000 callejones laberínticos invitan a andar y andar sin dejar de poder admirar todos sus contrastes. Se considera una de las ciudades más espirituales de Marruecos por las numerosas mezquitas, y conserva la universidad más antigua del planeta, que fue, además, fundada por una mujer.Imprescindible visitar las curtidurías, y admirar el arduo trabajo que se hace, para tintar, secar y trabajas las pieles. Y también disfrutar del atardecer desde nuestro hotel, o cualquier otra terraza con vistas a la ciudad. Hoy es nuestro último día del viaje, aunque si tenéis más días, os recomendamos que os quedáis una noche más en la ciudad.